Pasar mucho tiempo con personas conlleva a muchas cosas, dentro de eso conocer lo bonito de cada uno, saber qué es lo que le molesta a la otra persona, también el autoconocimiento es importante cuando convivimos con más gente o pasamos gran parte del tiempo con otros. Esto es aplicable a todo tipo de relaciones personales como parejas, compañeros de trabajo, grupo de amigos, relación con los hijos, abuelos, etc. Con Bárbara y Jorge fue uno de esos bellos casos que me encantan donde no sólo los conozco a ellos, también a su hija pequeña, a sus hermanos, padres y a su familia completa ¿por qué me agrada esto y es algo importante? No lo sé, pero siempre estoy en proceso de averiguarlo.

El contacto con Bárbara y Jorge fue muy similar a cómo lo realizo con las demás parejas. Bárbara me habló desde matrimonios.cl y posteriormente agendamos un llamado. Desde ahí todo fluyó de manera fenomenal, si bien no hablaba con ellos muy seguido o como si fuesen amigos que conociera hace bastantes años, había algo que me hacía sentir cómodo y tranquilo. Con Jorge era hablar y hablar y hablar, de variadas cosas y siempre muy directo, algo maravilloso. Con Bárbara fue mucho más lento, con ella me comunicaba a través de mensajes y conversábamos bastante, sin embargo cuando nos juntábamos esa conversación no era tanto - quizás con jorge hablábamos demasiado. Y aquí hay algo muy interesante que es una de las cosas que me encanta de mi trabajo. Con el tiempo fue todo lo contrario, junto a Bárbara ya hablábamos más y me sentí muy cómodo con ellos. Me sentía familiarizado con ellos, en un entorno seguro y tranquilo, lo que se transmitió a mi labor.
La confianza da paso a la seguridad - al menos para mi - y eso lo expreso al momento de tomar las fotografías, no bajo la cámara, que no significa que tomo un millón de fotos, simplemente estoy más preparado para disparar, esto me lleva a una pregunta ¿me hace falta confianza y sentirme cómodo para fotografiar?
Al parecer en mi caso si ¿pero siempre ha sido así? ¿En todos mi trabajos? Recuerdo sensaciones distintas en trabajos anteriores pero no algo como inseguridad y falta de confianza, no obstante tampoco me he sentido tan seguro como me siento ahora. Este desarrollo y bajo este contexto ha sido fundamental para mi crecimiento, muy importante al momento de plasmar un trabajo, y es fundamental que podamos sentir esto, que descubramos nuestra seguridad y confianza en nosotros mismos. En este mismo camino es donde la zona de confort puede volverse una tranca, interpretándolo como no salir de nuestro propio contexto (en un caso de fotos de matrimonios) y encontrando ese punto exacto que tanto anhelamos pero que nos quedamos en él ¿me siento cómodo en una zona de confort? No realmente.
Esto me lleva a la calma, al dormir y no al despertar brusco que necesito para estar atento. Al parecer busco una zona propia para cada pareja, busco sin querer - o quizás con querer -una zona especial para los tres, donde no exista nadie más que nosotros e inconscientes de que tenga una cámara en mi cara apuntando a sus rostros ¿es quizás mi búsqueda de la zona de confort la tarea más compleja que tengo e mi oficio? ¿Cómo puedo plantear esto al fotoreportaje o a la fotografía de bodegón? Como cada personas vive bajo su propio contexto, la fotografía - y todas sus ramas - es igual, cada fotógrafo busca trabajo bajo sus parámetros ¿en la confianza un necesario para trabajar? No, pero es clave para avanzar y progresar ¿es la seguridad el elemento fundamental para realizar buenos trabajos? Un espacio seguro será vital para estar, para crear el trabajo y así realizarlo, pero tampoco es un factor relevante para desarrollar una idea, pero quizás necesario para evolucionar.

¿Cómo logro esta auto-confianza y cómo la reflejo? No lo sé, se presenta, fluye, nace ¿se crea? Hay caminos que pueden llevar a eso, pero no son definitivos, sin lugar a dudas no hay un camino corto, un atajo, siempre es el camino largo, el más complejo, pero el más hermoso ¿necesito la confianza para tomar fotografías? Para mi, si, definitivamente. El trabajo cambia, es otro, la comunicación es otra, el trato es diferente y así es más “fácil” la labor, tanto mía como de los novios. Con Bárbara y Jorge fue así y ellos hicieron posible que yo vea más allá de sólo disparar y conversar. Hicieron posible el comprender cómo armar un escenario adecuado entre fotógrafo y pareja, que lo más probable es que nace todo solo, que fluye, aunque la importancia de entregar el tiempo a la otra persona es fundamental ¿qué puede ser más importante que una persona te entregue su tiempo? ¿Qué puede ser más significativo que alguien esté contigo? Pasamos la mayor parte de nuestro tiempo con las personas que más queremos e importante para nosotros ¿entonces por qué no entregarse a una pareja para crear un lazo así?
¿Es fundamental? Si, claro que si ¿es necesario? Tal vez no.
Entregar tiempo, regalar tiempo, es el regalo más importante que podemos brindar. No hay manera que el tiempo se malgaste, eso no existe, el tiempo nos pasa y sólo sufrimos las consecuencias - positivas o negativas. La confianza y la seguridad van con el tiempo y es difícil entregarlo, porque nadie quiere perderlo.
